A la memoria de su tío Alfredo
Esperanza Macarena
dolorosa de San Gil
Madre de Dios hecho hombre
que Él como madre nos dio.
No hacen falta en tu Basílica
velas , flores ni riquezas
porque tu sola presencia
llena de luz y hermosura.
Centra en tu cara divina
los ojos de quien te mira
y encuentra en Tí su Esperanza.
Devoción de mi familia
de mi abuela, de mi padre
y de su hermano pequeño.
A todos estoy segura
de la mano Tú guiaste
hasta las puertas del cielo.
Cada vez que voy a verte
me acuerdo de todos ellos
del ejemplo de sus vidas y
de la fe que me dieron.
Solo pido Macarena
que cuando llegue mi hora
yo merezca como ellos
poder llegar de tu mano
hasta las puertas del cielo.
Autora: Dª M. Pilar Gómez Jiménez