La Virgen de la Esperanza en besamanos
La Virgen de la Esperanza luce para su besamanos el manto que diseñara entre 1899 y 1900 Juan Manuel Rodríguez Ojeda y que popularmente se conoce como “de malla”. La saya, conocida como la de “los volantes”, fue diseñada por Ignacio Gómez Millán y bordada en el taller de José y Victoria Caro entre 1936 y 1937.
La Virgen porta la medalla de la ciudad y la medalla de Juan XXIII, además de la pluma de Muñoz y Pabón, el rosario verde y la cruz pectoral de Bueno Monreal. El conjunto de joyas se completa con broches de brillantes donados por Pilar Calvo de Banús y el rosario del papa Juan XXIII.
El montaje del besamanos recupera un modelo clásico en la Hermandad de la Macarena, con la Virgen situada a los pies del presbiterio y, tras ella, las escaleras que suben hasta el camarín, donde está colocado el sillón con el anagrama de María. El adorno floral está compuesto por astromelias, liliums, claveles y nardos.
La Virgen de la Esperanza permanecerá en besamanos desde hoy viernes 15 de diciembre hasta el próximo lunes 18 de diciembre, festividad de la Expectación de la Santísima Virgen María. El horario será de 09:00 a 21:00 horas, quedando interrumpido el besamanos para la celebración de la santa misa.
El tradicional besamanos de la Virgen de la Esperanza data de 1925, año en que la Junta de Gobierno de la Hermandad decide que la Santísima Virgen quede expuesta en la parroquia de San Gil para que los devotos puedan besar su mano durante el 18 de diciembre y la mañana del 19. Esta decisión es histórica ya que supone la primera vez que una imagen sagrada es expuesta para que pueda ser besada, siendo la Hermandad de la Macarena la inventora de este acto de veneración popular tan extendido en la actualidad.
Fotografías: Emilio Sáenz.
